Dias de Furbo

Eran las 15:15 de la tarde del sábado 13 de mayo de 2006. Fueron unas 32 horas sin dormir cuando acababa de dar una profunda y deseada caezaita entonces inesperadamente suena el teléfono y comienzo a hablar con un personaje al cual no reconcía. Después de unos momentos de confusión ya recuerdo quién es, mi compañero de la facultad al que hacía tres años no veía ni hablaba con él, creo que la última ocasión fue durante la celebración del ascenso del Cádiz a segunda.

A unos saludos de rigor le sigue una extraña pregunta: ¿Te vienes a jugar un partido de Futbol? No sabía qué responder porque él sabe que nunca ha sido esa mi gran afición, él sabe que me retiré en el año 94 despues de marcar mis dos únicos goles en la semifinal del campeonato del instituto con el equipo OFI de Letras. Además le conté que esa misma tarde no podia ya que iba a ir a la boda de un gran amigo mio con el que llevaba prácticamente dos años sin hablarnos. Él me dijo que el partido sería el 8 de julio, no entendí entonces tanta premura en el aviso pero finalmente acepté la invitación.

La verdad que no me veía reapareciendo en los terrenos de juego pero hay que ver las cosas que uno es capaz de hacer por quedar con alguien al que aprecias y hace mucho que no ves. Entonces va el nota y me sorprende diciendome que confia en mi, que cuenta conmigo y que me compra el billete, que ya otro día se lo pago.

Espera, de que estamos hablando: ¿Billete? ¿Billete pa que? Billete para ir a Italia ya que el partio se va a jugar en Nápoles. ¿Nápoles? ¿qué pasa que esta ocupao el Otega Peito de Las Canteras pa esa fecha? Finalmente me contó un cuento de una revancha con unos amigos italianos que vieniero a jugar a cádiz el verano pasado y no se que más historias. La verdad que no tenia yo el cuerpo ni el coco pa más na así que le dije que ya me contaba to los detalles durante el viaje.

Se que la historia es un poco extraña, tanto es asi que me desperté al rato y creí que la había soñao, pero acudí a mi telefono y allí estaba: Angel 15:15. Así que me calzaré las botas doce años después para jugar un partido internacional.

¿Por qué to me tiene que pasar a mi?