Potaje de habichuelas
El Viaje de Totito acaba de dar otro vuelco. Ya no sabemos si se trata de una exploración interior o de un libro de rutas incumplidas. Ya no nos cuenta historias poco creíbles ni nos enseña fotografía aun no realizadas.
En el momento en el que dejó de mostrarnos canciones viajeras y nos recordó esa legendaria, y quizás única, canción culinaria se comenzaba a deslumbrar su nuevo rumbo. No sabemos, sin duda él tampoco, su entrada en la cocina es una nueva vía de escape, otra forma de cruzar el espejo, o es la consecuencia inmediata, la huella dejada por la ruta d etapas anteriormente realizada.
En fin; seguiremos a la escucha:
Potaje de Habichuelas
La elaboración de este exquisito, pero a la vez básico plato de cuchareo por derecho, es muy sencilla y no tarda mas de cincuenta minutitos.
Los ingredientes necesarios son muy fáciles de conseguir, si no los tenemos nosotros seguro que la vecina si: Habichuelas remojadas desde la noche anterior (un puñaito por persona y día), un tomate pequeño entero, cebolla picada, 1 pimiento sin cabeza, dos dientes de ajo enteros, unos pedazos de chorizo (no vale comérselo antes de echarlo), una cuchará de pimiento molido y un puñaito de chicharos congelados (si son de lata se añaden más tarde, al aceite).
La elaboración es la siguiente: Se ponen a hervir las habichuelas en el mismo agua del remojo. Cuando hierve se le escurre el agua y se enjuagan (así pierden parte de los gases y el ambiente familiar se relaja). Se vuelven a cubrir con agua y se ponen en la cacerola junto a todos los ingredientes antes dichos o mencionados. La cacerola puesta en el fuego comenzará a hervir al ratillo, entonces se añade el aceite y los chicharos son de lata. Justo al final, cuando la habichuelas se revientan un poco, es cuando se sazona al gusto personal o colectivo.
7 Comments:
Alimentarse y mineralizarse.
Pero no sería más conveniente hablar de un plato un poco más ligero, más propio del estío. No sé, un salmorejo por ejemplo.
Salmorejo, buen plato, muy veraniego, muy vegetalizado y mineralizado. Pero igualmente bonito es en verano sudar los garbanzos del menudo, lentejas y habichuelas.
Además son platos ligeros y ayudan a adelgazar y estar como un pincel, se suda mas con ello que en un abierto de tenis.
Si le hubieses añadido arroz a las habichuelas, hubieras dado de lleno con mi plato preferido, acompañado, eso sí, de una simple ensalada de lechuga y para beber, ¡casera de naranja!
Mi técnica. como hago normalmente solo para mí, intento hacer para dos día y es en el segundo cuando echo arroz.
Igual hago con las lentejas.
Por si hay gente que no es de Puerto Real ( ni lo quiere ser) leyendo esto, habría decir que las habichuelas también son conocidas como alubias y los chicharos como guisantes.
¿Por qué en vez de tantas americanizadas barbacoas veraniegas hace una potajada en nuestro próximo encuentro?
Apetecible, pero ahora no. Sólo de leer la receta ya estoy sudando... Gracias al misio por la traducción.
Cool guestbook, interesting information... Keep it UP
»
Post a Comment
<< Home